VITAMINA D: AHORA ES TIEMPO DE ELLA...
LA VITAMINA D Y SU IMPORTANCIA:
La vitamina D es un nutriente esencial que nuestro cuerpo necesita para
mantener huesos y dientes saludables, así como para regular el sistema
inmunológico y reducir la inflamación.
Un déficit de vitamina D se
ha relacionado con varios problemas de salud, incluyendo:
· Enfermedades
óseas: La vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio, que es esencial para
la salud de los huesos. La falta de vitamina D puede provocar una disminución
de la densidad ósea, lo que aumenta el riesgo de fracturas.
· Enfermedades
autoinmunitarias: La vitamina D también juega un papel importante en la
regulación del sistema inmunológico. Los estudios han relacionado una
deficiencia de vitamina D con un mayor riesgo de enfermedades autoinmunitarias
como la esclerosis múltiple, la artritis reumatoide y la enfermedad
inflamatoria intestinal.
· Enfermedades
cardíacas: La vitamina D también puede ayudar a mantener la salud del corazón.
La deficiencia de vitamina D se ha relacionado con un mayor riesgo de
enfermedades cardiovasculares, incluyendo enfermedades del corazón y accidentes
cerebrovasculares.
Hoy en día está muy mirada
en las analíticas y cada vez sabemos más acerca de ella.
Hay muchos estudios sobre los efectos de la vitamina D en la salud.
Un estudio publicado en la
revista The Lancet Diabetes & Endocrinology en 2014, por ejemplo, encontró
que las personas con niveles bajos de vitamina D tenían un mayor riesgo de
morir prematuramente. Otro estudio publicado en la revista PLOS ONE en 2015
encontró que los suplementos de vitamina D podrían reducir el riesgo de
enfermedades respiratorias en bebés prematuros.
Algunos más recientes como:
· Un estudio
publicado en 2020 en la revista Journal of Clinical Endocrinology and
Metabolism encontró que los niveles bajos de vitamina D se asociaron con un
mayor riesgo de hospitalización y muerte por COVID-19.
· Un estudio
publicado en 2021 en la revista Nutrients encontró que los suplementos de
vitamina D pueden ayudar a mejorar la función inmunológica en personas mayores.
· Un estudio
publicado en 2021 en la revista Scientific Reports encontró que la deficiencia
de vitamina D puede aumentar el riesgo de complicaciones después de una cirugía
de reemplazo de cadera.
· Un estudio publicado
en 2021 en la revista Frontiers in Nutrition, que encontró una asociación entre
la deficiencia de vitamina D y la obesidad en niños y adolescentes. En el
estudio, se midieron los niveles de vitamina D y se evaluaron las medidas de
obesidad en un grupo de niños y adolescentes. Se encontró que aquellos con
niveles más bajos de vitamina D tenían mayores medidas de obesidad en comparación
con aquellos con niveles más altos de vitamina D. Los autores del estudio
sugieren que la deficiencia de vitamina D puede ser un factor contribuyente a
la obesidad en niños y adolescentes y que puede ser necesario aumentar la
ingesta de vitamina D en esta población.
La investigación sobre este
nutriente sigue en curso y es importante seguir investigando su papel en la
salud humana.
La exposición al sol es la principal fuente de vitamina D para el cuerpo
humano. Para absorber la cantidad adecuada de vitamina D, se necesita exponer
la piel a la luz solar directa durante un período de tiempo determinado y
dependiendo de la ubicación geográfica, la estación del año, la hora del día,
la pigmentación de la piel y la cantidad de piel expuesta.
En general, se recomienda exponer al sol la mayor parte del cuerpo
(excluyendo la cara, manos y brazos si se busca una exposición moderada)
durante 15-20 minutos al día, dos o tres veces por semana, en horas de menor
intensidad de rayos UV, evitando siempre las horas centrales del día, entre las
10:00 y las 16:00 horas, para evitar quemaduras solares y daño en la piel. Es
importante tener en cuenta que la cantidad de exposición necesaria para
producir suficiente vitamina D varía según el individuo, así que siempre es
recomendable consultar con un médico antes de aumentar significativamente la
exposición al sol.
En España, las latitudes
varían desde los 36 grados norte en la costa sur hasta los 43 grados norte en
la costa norte, lo que significa que en algunas áreas del país, la luz solar es
más fuerte durante todo el año. Sin embargo, durante los meses de verano, el
sol suele estar más alto en el cielo y su intensidad es mayor, lo que significa
que se necesita menos tiempo de exposición al sol para producir suficiente
vitamina D. Es decir, el sol se sitúa en un ángulo de 90 grados haciendo que
penetre mejor la luz solar.
Pero es importante tener en cuenta que la exposición al sol en exceso,
especialmente durante las horas centrales del día, puede ser perjudicial para
la salud de la piel y aumentar el riesgo de quemaduras solares y cáncer de
piel. Por lo tanto, se recomienda seguir las pautas de exposición segura al
sol, incluyendo evitar la exposición prolongada durante las horas más intensas
del día y usar protección solar adecuada, como sombreros y ropa protectora y
aplicar protector solar adecuado.
ES IMPORTANTE SEÑALAR QUE LA VITAMINA D TAMBIÉN SE ENCUENTRA EN ALIMENTOS:
La vitamina D se encuentra en pocos alimentos naturalmente, pero se puede
obtener de fuentes alimenticias fortificadas y suplementos. Algunos alimentos
que contienen naturalmente vitamina D son:
·
Pescados grasos,
como el salmón, el atún, la caballa y las sardinas
·
Hígado de res y
aceite de hígado de bacalao
·
Yema de huevo
Además, muchos alimentos son
fortificados con vitamina D en algunos países, como la leche, los cereales para
el desayuno, la leche de soja, el yogur y los jugos de naranja. También se
pueden encontrar suplementos de vitamina D en forma de pastillas, cápsulas y
líquidos.
Es importante mencionar que la cantidad de vitamina D que se encuentra en
los alimentos naturalmente es generalmente baja, y para lograr las dosis
recomendadas, puede ser necesario complementar la dieta con alimentos
fortificados o suplementos. Además, las personas que tienen deficiencia de
vitamina D pueden necesitar una dosis más alta de suplementos para alcanzar
niveles adecuados en el cuerpo.
Es importante tener en cuenta que aunque los suplementos de vitamina D
pueden ser beneficiosos en ciertos casos, es importante no tomar dosis
excesivas de vitamina D ya que puede ser tóxica. Si tienes alguna preocupación
sobre tus niveles de vitamina D, es recomendable que hables con tu médico.
SUPLEMENTACION:
La suplementación de vitamina D se puede tomar en diferentes formas,
incluyendo pastillas, cápsulas, líquidos y gomas de mascar. La forma más común
de suplementación de vitamina D es la forma de colecalciferol (vitamina D3),
que se encuentra en la mayoría de los suplementos de venta libre.
La cantidad de
suplementación necesaria dependerá de los niveles actuales de vitamina D en el
cuerpo y las necesidades individuales de cada persona. Generalmente, se
recomienda una dosis diaria de 1000 a 2000 UI de vitamina D para la mayoría de
las personas, pero en algunos casos se pueden necesitar dosis más altas bajo
supervisión médica.
Es recomendable tomar la suplementación de vitamina D con alimentos que
contengan grasa para mejorar su absorción, ya que la vitamina D es soluble en
grasas. También se puede tomar junto con una comida principal del día para
mejorar su adherencia y evitar posibles molestias gastrointestinales.
Es importante mencionar que siempre es recomendable consultar con un médico antes de iniciar la suplementación de vitamina D, especialmente si se tiene una afección médica subyacente o se está tomando algún medicamento, ya que puede haber interacciones o efectos secundarios no deseados.
UN CONSUMO ELEVADO DE VITAMINA D PUEDE CAUSAR:
La hipervitaminosis D puede ocurrir cuando se consume una cantidad excesiva
de vitamina D a través de la dieta o los suplementos. También puede ocurrir
cuando se toma demasiado sol, ya que la exposición excesiva a la luz solar
puede producir grandes cantidades de vitamina D en la piel.
Los síntomas de la
hipervitaminosis D pueden incluir náuseas, vómitos, dolor de cabeza, fatiga,
pérdida de apetito, estreñimiento, debilidad muscular, problemas renales y
otros síntomas. En casos graves, puede haber daño renal, cálculos renales,
hipercalcemia (niveles elevados de calcio en la sangre) y otros problemas de
salud graves.
Es importante mencionar que la hipervitaminosis D es poco común, y
generalmente solo ocurre cuando se consume cantidades excesivas de suplementos
de vitamina D. La mayoría de las personas pueden satisfacer sus necesidades de
vitamina D a través de una dieta equilibrada y una exposición moderada al sol
sin preocuparse por la hipervitaminosis D. Sin embargo, siempre es importante
hablar con un médico antes de comenzar a tomar suplementos de vitamina D para
evitar posibles efectos secundarios no deseados.
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