QUE ES LA DIETA MACROBIÓTICA?

La macrobiótica, introducida en Occidente por en pensador japonés George Ohsawa, considera al universo como un macrocosmos y al hombre como microcosmos integrado en él. Ambos se rigen por el principio de complementarse entre el ying y yang, dos fuerzas antagonistas e inseparables, que lo conforman, cuya dinámica constituye el orden del universo.

En macrobiótica se plantea un principio básico que consiste en "no creer ciegamente". Cada uno tiene que comprender, practicar y verificar por sí mismo, ya que cada caso es particular y ésta en permanente cambio. Por tanto, plantea la consideración del hombre como un ser destinado a desarrollar la conciencia y a alimentarse en función de sus necesidades, en el día a día. 

EN QUE CONSISTE.


El sistema macrobiótico preconizado por Oshawa consiste en una serie de diez dietas que van de menos tres a más siete. Las cinco primeras (-3 a +2) incluyen cantidades decrecientes de alimentos de origen animal. Las dietas restantes (+3 a +7) son exclusivamente vegetarianas y contienen cantidades crecientes de granos de cereales, hasta llegar a la dieta siete. Ésta se compone exclusivamente de granos de cereales groseramente triturados.
En la medida en que este régimen llega a ser exclusivamente cerealista es muy desequilibrado: insuficiencia proteica en calidad (los cereales son bajos en el aminoácido lisina) y cantidad, carencia de hierro, vitaminas A, D, B12, caroteno, vitamina C. Bajo contenido en calcio y hierro, dificultada la absorción por la presencia de ácido fítico en las envueltas de los granos de cereales.p> Se detectan casos de: anemia, escorbuto (por carencia de vitamina C), hipocalcemia (déficit de calcio) e hipoproteinemia (déficit proteico). Por otro lado, la reducción del agua de bebida para todas las dietas constituye un peligro que se manifiesta por deshidratación e insuficiencia renal.

PRINCIPIOS DE RÉGIMEN DE ESTA DIETA.

- Se deben suprimir los alimentos industriales: azúcar, conservas, colorantes, huevos no fecundados.

- Los cereales deben ser integrales ( arroz completo, trigo, alforfón, centeno, maíz, cebada, mijo, cocidos o crudos, hervidos o salteados, al horno o a la crema). Considera que cuando se refina un alimento se le resta parte de sus características, por lo que se desequilibra. 

- Hay que cocinar los alimentos con aceite vegetal o agua, en recipientes de barro cocido, pyrex o de hierro esmaltado, salar con sal marina no refinada ni enriquecida. 

- Abstenerse de frutas y verduras cultivadas o tratadas con abonos químicos. Y 
preferentemente las verduras de cada estación. 

- Evitar las hortalizas Yin, como patatas, berenjenas y tomates. 

- No tomar especias ni ingredientes químicos. 

- Está prohibido el café; sólo se admite beber té de China natural y té japonés.

- Se debe reducir al máximo la ingesta de líquidos. 

- La masticación es importante. Hay que masticar cada bocado por lo menos 50 veces.

- Alimentos orientales: algas, la soja, el miso, el tamari, ciruelas umeboshi, entre otros. 

Para alcanzar ese objetivo, se propone un sistema alimenticio basado en vivir con lo que es necesario y comer sólo cuando se tiene hambre y sólo la cantidad necesaria. 

LA DIETA MACROBIÓTICA

Varía en función del estado del salud de la persona y de sus características, ya que no es lo mismo para un niño, un adulto o un anciano. No hay alimentos prohibidos, sino una elección según convenga a cada caso en particular.

Para el lactante, el pecho es sustituido en el momento del destete por una mixtura especial, "el Kokoh", mezcla extremadamente diluída de granos de sésamo, arroz, judías rojas, trigo, avena y soja. El equilibrio en aminoácidos es correcto, pero el valor calórico global es muy escaso, por lo que las proteínas se utilizan como fuente energética y no para la construcción de tejidos. Con frecuencia se observa un retraso en la estatura, el peso y carencias de minerales y vitaminas en niños alimentados de ese modo: raquitismo o síndrome de Biermer (anemia perniciosa o megaloblastica: anemia por falta de vitamina B12) . 

No es por tanto sorprendente que se hayan descrito en la literatura médica repetidos casos de muerte en personas que seguían la dieta macrobiótica sin ningún tipo de control ni conocimiento. En el año 1996 el Gran jurado del Estado de Nueva Jersey sentenció que la dieta macrobiótica constituía un peligro para la salud de la población.  En 2008, otra publicación ( 2008 Oct;12(5):807-8. doi: 10.1188/08.CJON.807-808.Can a macrobiotic diet cure cancer?) añadió que conviene que toda persona que siga una dieta macrobiótica, aunque se encuentre bien, sea visitada por un profesional sanitario que esté alerta ante posibles deficiencias nutricionales.

A día de hoy existen famosas que lo llevan a cabo y es una de las más seguidas, por desgracia, por las personas que padecen alguna clase de cáncer, aunque no hay pruebas que nos hagan pensar que esta propuesta pueda prevenir de forma efectiva el cáncer.

Por ello, hay cosas importantes que puedes meter o modificar en tu alimentación diaria (como quitar los alimentos refinados o empezar a consumir cereales integrales), pero yo personalmente no seguiría al pie de la letra este tipo de dietas. Un punto a destacar, yo soy partidaria de la lactancia materna aunque he de decir que no tengo hijos, pero me parece que es lo mal natural posible y hay estudios y evidencias de que es beneficiosa para el ser humano (bebe) ya no solo por el aporte nutricional si no también por la microbiota intestinal. 


Comentarios

Entradas populares